“Tu coronas el año con tus bienes, y tus nubes destilan grosura.” (Salmos 65:11).

“Guárdame como la niña de tus ojos, escóndeme bajo la sombra de tus alas” (Salmos 17:8).

“Keep me as the apple of the eye, hide me under the shadow of thy wings” (Psalm 17:8).

“He will turn again, he will have compassion upon us; he will subdue our iniquities; and thou wilt cast all their sins into the depths of the sea” (Micah 7:19).

“He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones y sobre toda fuerza del enemigo y nada os dañara” (Lucas 10:19).

“El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento” (2 Pedro 3:9).

“The Lord is not slack concerning his promise, as some men count slackness; but is longsuffering to us-ward, not willing that any should perish, but that all should come to repentance” (2 Peter 3:9).

“Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres” (Tito 2:11).

“An angry man stirreth up strife, and a furious man aboundeth in transgression” (Proverbs 29:22).

“Echa fuera al escarnecedor, y saldrá la contienda, y cesará el pleito y la afrenta” (Proverbios 22:10).

“Cast out the scorner, and contention shall go out; yea, strife and reproach shall cease” (Proverbs 22:10).

“El odio despierta rencillas; pero el amor cubrirá todas las faltas” (Proverbios 10:12).

“Casting all your care upon him; for he careth for you” (1 Peter 5:7).

“Y ante todo, tened entre vosotros ferviente amor; porque el amor cubrirá multitud de pecados’” (1 Pedro 4:8).

“Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús” (Filipenses 4:7).

“And the peace of God, which passeth all understanding, shall keep your hearts and minds through Christ Jesus” (Philippians 4:7).

“Por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios (Romanos 5:2).