“Entrad por la puerta estrecha, porque ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella. Porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan” (Mateo 7:13, 14).

“¿Cuánto más la sangre de Cristo, el cual mediante el espíritu eterno se ofreció a si mismo sin mancha a Dios para que sirváis al Dios vivo?” (Hebreos 9:14).

“Porque ignorando la justicia de Dios, y procurando establecer la suya propia, no se han sujetado a la justicia de Dios. Porque el fin de la ley en Cristo para justicia a todo aquel que cree” (Romanos 10:3, 4).

“Asimismo, a todo hombre a quien Dios da riquezas y bienes, y le da también facultad para que coma de ellas, y tome su parte, y goce de su trabajo, esto es don de Dios” (Eclesiastés 5:19) .

“For unto us a child is born, unto us a son is given: and the government shall be upon his shoulder: and his name shall be called Wonderful, Counsellor, The mighty God, The everlasting Father, The Prince of Peace” (Isaiah 9:6).

“Antes bien, creed en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén” (2 Pedro 3:18, NVI).

“For I know the plans I have for you,’ says the Lord. ‘They are plans for good and not for disaster, to give you a future and a hope’” (Jeremiah 29:11, NLT).

The Contrast: Righteousness and Condemnation

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